Niveles sanguíneos de Omega-3, ¿indicador del riesgo de mortalidad prematura?
FEDERICO LARA VILLOSLADA
Doctor en Farmacia por la Universidad de Granada,
Coordinador Científico del Instituto Puleva de Nutrición (IPN)
Director I+D Lactalis Puleva
La revista científica Nature Communications ha publicado recientemente una nueva investigación científica que analiza los niveles sanguíneos de los ácidos grasos omega-3 y su relación con el riesgo de muerte prematura por cualquier causa.
Antecedentes
Los ácidos grasos omega-3 son popularmente conocidos por sus numerosos beneficios y evidencia científica disponible a nivel cardiovascular, pues se asocian con un menor riesgo de infarto de miocardio, de enfermedad coronaria y de mortalidad por enfermedad cardiovascular.
Son ácidos grasos poliinsaturados que se encuentran principalmente en el pescado azul, como el salmón, el atún o las sardinas, aunque también se pueden obtener de alimentos enriquecidos en este nutriente, como por ejemplo la leche.
Objetivos
El objetivo de la revisión fue examinar la posible asociación entre la mortalidad por cualquier causa, especialmente por enfermedad cardiovascular y cáncer, y los niveles sanguíneos de ácidos grasos poliinsaturados omega-3: α-linolénico (ALA), eicosapentaenoico (EPA), docosapentaenoico (DPA), docosahexaenoico (DHA) y el sumatorio EPA+DHA.
El estudio
Se analizaron un total de 17 estudios prospectivos de cohortes con una muestra total de 42.466 personas, de las cuales 15.720 murieron durante el desarrollo de los mismos (16 años). El 30% de estas muertes se debió a enfermedades cardiovasculares, otro 30% a causa de diferentes tipos de cáncer y el 40% restante a otras causas no determinadas.
Los resultados para cada uno de los ácidos grasos analizados concluyen que los mayores niveles sanguíneos de EPA, DPA, DHA y EPA+DHA se asociaron con una reducción del riesgo de muerte de entre el 15 y el 18%, dejando claro el papel protector de los ácidos grasos omega-3 frente a una muerte prematura.
Adicionalmente, el estudio también demostró que los ácidos grasos omega-3 protegen contra determinadas enfermedades, como las cardiovasculares o el cáncer. Cuanto mayores fueron los niveles en sangre de los ácidos grasos EPA, DHA y EPA+DHA, menor fue el número de muertes por enfermedad cardiovascular. Por su parte, EPA y DHA también demostraron cierto efecto protector frente al cáncer, ya que se asociaron con una disminución de fallecimientos a causa de esta enfermedad.
En definitiva, los mayores niveles sanguíneos de ácidos grasos omega-3 se asociaron a un menor riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular, muerte por cáncer y por otras causas.
Conclusión
El estudio ha revelado que niveles sanguíneos más altos de ácidos grasos omega-3 DPA, DHA y EPA+ DHA se relacionan de forma inversa con muertes por cualquier causa. No obstante esta relación no se mantiene para niveles más altos de omega-3 ALA.
Estos resultados permiten plantear los niveles sanguíneos de ácidos grasos omega-3 como un nuevo marcador del riesgo cardiovascular, sencillo de determinar, y refuerza la evidencia que asocia a estos ácidos grasos no solo con una mejor salud cardiovascular sino también con una posible reducción de mortalidad por otras causas.
Fuente
El artículo está disponible en el siguiente enlace (versión en inglés).
Referencia
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