Consumo de lácteos y riesgo de infección por COVID-19
FEDERICO LARA VILLOSLADA
Doctor en Farmacia por la Universidad de Granada,
Coordinador Científico del Instituto Puleva de Nutrición (IPN)
Director I+D Lactalis Puleva
Los productos lácteos han sido reconocidos como parte de una dieta saludable que podría ayudar a mantener un normal funcionamiento del sistema inmunitario y prevenir infecciones. Según un estudio publicado en el European Journal of Clinical Nutrition, dados los posibles efectos beneficiosos para el sistema inmunitario de los productos lácteos, se plantea la hipótesis de que su consumo habitual podría reducir el riesgo de infección por COVID-19.
Antecedentes
La evidencia muestra que la gravedad de las manifestaciones clínicas y la tasa de mortalidad de la COVID-19 varían de una persona a otra y el sistema inmunitario y los factores que lo afectan juegan un papel fundamental.
La nutrición y los componentes dietéticos, así como la seguridad alimentaria son factores modificables que podrían contribuir a la función inmunológica. Y en este sentido los lácteos han sido reconocidos como parte de una dieta saludable que podría ayudar a fortalecer la inmunidad y prevenir infecciones, especialmente infecciones virales.
La leche y los productos lácteos son ricos en proteínas, zinc, selenio, vitamina A, vitamina D y vitamina B12, nutrientes vinculados con el adecuado funcionamiento del sistema inmunitario. La ingesta suficiente de zinc de fuentes alimenticias ayuda a mantener la salud de las células inmunitarias y reduce la susceptibilidad a diversas infecciones, incluida la neumonía. La vitamina A es un importante regulador de la diferenciación y función de las células inmunitarias. Y la vitamina D también juega un papel importante en la respuesta y modulación del sistema inmunitario.
Además, las proteínas de los productos lácteos y los péptidos derivados de ellas tienen propiedades antioxidantes, antivirales y antiinflamatorias en las células pulmonares y regulan las respuestas inmunitarias.
Objetivos
El presente estudio se realizó para investigar la asociación entre el consumo regular de lácteos y la incidencia de COVID-19.
El estudio
Este estudio se llevó a cabo en 8801 adultos de 20 a 70 años y los datos sobre la ingesta dietética se obtuvieron utilizando un cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos validado.
Los datos de consumo de lácteos de todas las fuentes se clasificaron en lácteos totales, lácteos altos en grasa y lácteos bajos en grasa. En este estudio, se examinaron seis tipos de productos lácteos: leche, yogur, queso, Kashk, mantequilla y bebida de yogur. La leche y el yogur se clasificaron en dos categorías según la cantidad de grasa. Los productos lácteos que tienen más y menos del 3% de grasa se encuentran en las categorías de alto contenido de grasa y bajo contenido de grasa, respectivamente. El queso, la mantequilla, el Kashk y el yogur líquido también se consideraban productos lácteos ricos en grasas.
Resultados
Los hallazgos indicaron que la ingesta moderada de lácteos podría reducir las probabilidades de infección por COVID-19 y una mayor ingesta de productos lácteos bajos en grasa y leche desnatada tuvieron un efecto protector sobre la infección por COVID-19. Sin embargo, una mayor ingesta de productos lácteos ricos en grasas, leche rica en grasas, yogur total, queso y mantequilla, se relacionaron con un aumento de las probabilidades de infección por COVID-19. Esta asociación podría estar relacionada con los efectos de los productos ricos en grasa sobre la microbiota intestinal.
La principal diferencia entre hombres y mujeres estaba en el consumo de mantequilla. Las mujeres que consumían mucha mantequilla tenían mayores probabilidades de infección por COVID-19, mientras que la asociación entre el consumo de mantequilla y la infección por COVID-19 no fue significativa entre hombres.
Conclusiones
Estos resultados demuestran que la ingesta moderada de productos lácteos podría reducir un 37% las probabilidades de infección por COVID-19 y una mayor ingesta de productos lácteos bajos en grasa tuvo un papel protector contra la infección por COVID-19.
En cualquier caso la evidencia disponible y los estudios en este campo concreto no permiten todavía hacer recomendaciones nutricionales y se necesitarían más estudios que confirmaran estas hipótesis.
Fuente
El artículo está disponible en el siguiente enlace (versión original en inglés).
Referencia
Darand, M., Hassanizadeh, S., Marzban, A. et al. The association between dairy products and the risk of COVID-19. Eur J Clin Nutr (2022). https://doi.org/10.1038/s41430-022-01149-8